He tomado una decisión,
cada vez que tenga la estúpida necesidad de decirte que te quiero, vendré aquí y hablaré de ti, de tu maravillosa y odiosa sonrisa que me deja mirándote con cara de niña tonta y soñadora, o quizás de tus ojos verdes,de la sensación que me transmites cuando me miras de reojo de esa forma tan dulce. Otras veces me limitaré a decir la impotencia que siento por esto que, casi fue, y ya nunca será.
No hay comentarios:
Publicar un comentario